Autoconsumo

En España actualmente es posible realizar instalaciones de energía solar fotovoltaica para autoconsumo al amparo del R.D. 1699/2011. Estarán destinadas al autoconsumo instantáneo (sin acumulación) o con baterías, de modo que la energía que se genera en la instalación solar será inyectada en la red interior del usuario y consumida por éste. En ambos casos no se inyectará energía a la red eléctrica (instalaciones de “inyección cero”).

De esta manera, dependiendo del perfil de consumo del usuario, se puede reducir el consumo eléctrico de la red en porcentajes apreciables logrando un importante ahorro en la factura de la luz.

Dado el incremento constante del precio de la energía eléctrica y el progresivo ajuste del coste de las instalaciones fotovoltaicas, la apuesta por un sistema fotovoltaico para autoconsumo se traducirá en un importante ahorro económico y en una inversión con una atractiva rentabilidad.

A modo indicativo se expone a continuación la evolución que ha sufrido el precio del kWh del consumidor medio industrial y doméstico en los últimos años (Fuente: Eurostat).

EVOLUCION PRECIO kWh INDUSTRIAL

EVOLUCION PRECIO kWh DOMESTICO

Por ello una instalación de autoconsumo es todavía más interesante en estas circunstancias, pues:

Un porcentaje de la electricidad consumida provendrá de la instalación solar, por lo que el coste de la misma es fijo y no está expuesto a las variaciones del precio del mercado. Esto supone que globalmente se reduce el precio de la energía consumida.

Una vez amortizada la instalación, y hasta el final de la vida útil de la misma, se obtiene una energía gratuita procedente los paneles solares fotovoltaicos.

Además supondrá una reducción de las emisiones a la atmósfera asociados a los sistemas de generación convencionales, mejorando el compromiso del cliente con el medio ambiente. En el caso de las empresas permitirá además reducir su huella de carbono e implementar medidas acordes a la Responsabilidad Social Corporativa.